Expertos en economía y entidades locales e internacionales del sector señalan que Costa Rica mantendrá para el segundo semestre del 2022 la línea de crecimiento que trae desde el 2021, a pesar de la tendencia inflacionaria que vivirán todos los países por las diversas circunstancias que aquejan al planeta. “Las metas se han ido ajustando poco a poco conforme lo que va pasando en el año, pero Costa Rica tendrá un cierre bastante positivo a pesar de lo que lo que está sucediendo entre Ucrania y Rusia, la crisis de contenedores y el aumento de materias primas energéticas y agrícolas”, dijo el economista Daniel Suchar.
“El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha definido este 2022 como un año inflacionario, pero eso no quiere decir que no pueda ser un año de recuperación para las economías”, agregó.
Según el Banco Central de Costa Rica (BCCR), tras su más reciente revisión de los objetivos económicos, en abril, el crecimiento del 2022 cerrará en 3,4%, mientras que en el 2023 llegará a 3,9. La meta de inflación la mantuvo entre 2% y 4%.
La máxima entidad financiera del país aseguró que el crecimiento se asentará “sobre el repunte del consumo de los hogares, la inversión privada yel continuo impulso de las exportaciones”.
Sin embargo, también se mantienen sobre la mesa algunas preocupaciones, como, por ejemplo, que a pesar de que el mercado laboral sigue en línea con la recuperación, este se ha movido más lentamente.
Actualmente, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), el desempleo se encuentra en 13,6%, visiblemente a la baja desde inicios del 2021, pero aún más de un punto porcentual arriba de la tasa observada antes de la pandemia del covid-19. Tal cifra se combina con un 23% de la población en pobreza.
Ambos indicadores son dos a los que el gobierno, ahora dirigido por el economista Rodrigo Chaves, les puso el ojo y aseguró que su disminución se mantendrá. “Con el nuevo gobierno algunas tendencias serán aún mejores. Hay buen indicio”, dijo Suchar.
Entre las medidas que cita se encuentran la “apertura de algunos monopolios, y sectores proteccionistas o protegidos como aguacate y arroz, los cuales traerían más fluidez al mercado costarricense”.
“También, gracias a que ya no hay restricciones (por la pandemia), el área de transporte también tendrá una recuperación importante”, añadió.
Mientras tanto, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Costa Rica acabará este 2022 con un crecimiento de 3,9% y con un 2,9% en 2023.
La entidad señaló que “una fuerte demanda externa impulsará el crecimiento, con una recuperación más gradual del sector turístico”.
“Principalmente en hoteles y restaurantes y eso es importante para un país tan dependiente como es Costa Rica de este rubro”, sumó Suchar. Según datos del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), el sector turismo corresponde a más del 6% del Producto Interno Bruto (PIB).
Asimismo, la OCDE agregó que “la inversión privada repuntará con fuerza, animada por una mejora en las perspectivas económicas. La inflación subirá gradualmente, pero se mantendrá probablemente por debajo de la tasa objetivo del 3%, ya que los recursos productivos ociosos siguen siendo elevados”.